También El Paso acabó ganando tras disputada temporada. Al gran triunfo de Samuel Mateo y Toño el Rebotallo se suma la espectacular temporada hecha por los gallos de Lope Acosta, con Nesmel dedicado este año a pitarle a sus gallos en vez de a sus atletas
En la Banda este año han estado las cosas al rojo vivo. Solo en la última jornada se proclamaron campeones Los Llanos y El Paso, el primero por 2 de ventaja al ganarle a Tazacorte por 4-3 en la última jornada, y el segundo por 6 riñas, tras derrotar a La Lucha por 5-2, también en la última jornada.
Felicitamos a Samuel Mateo y a Toño el Rebotallo. El primero hizo la hombrada que pocos han hecho en la historia de los gallos: cambiar de partido y ganar. El segundo volvió a la senda de los triunfos, desquitándose del año anterior y ganándole a un partido repleto de grandes gallos. Pero las felicitaciones van para todos, ya que la temporada fue muy reñida siempre. En particular Josito el Menso supo saltar a la cátedra gallística de Canarias y hacer una espléndida campaña. Y buenos gallos tuvieron los cuatro partidos, con fuerzas muy equilibradas.
En la Capital, Pedro Pérez llevó siempre la ventaja, y así, si hace unas cuantas temporadas le ganaba allí Quico Acosta, ahora, cambiados de partido, lo hace él. Queda una jornada, pero la ventaja de 8 riñas tras este 3-3 ya es insalvable.
En el capítulo de casteadores, la estrella de la temporada ha sido Nesmel Acosta. Sus gallos, siempre al nombre legendario de Lope Acosta, fueron campeones en la Banda, con un colorado de 4 riñas y 19 puntos nada menos. Y con los gallos, además, en el partido, Tazacorte, que no ganó la contrata. Como corona, un gallo suyo, también colorado, le ganó 4 riñas en la Guerra, una de ellas en 10 segundos. Allí suma nada menos que 8 puntos, y ante gallos preparados por Quico, que no es lo mismo que ante combatientes de otros cuidadores. Dicen que este año Nesmel se ha superado al no estar dedicado al fútbol, pero realmente los casteadores palmeros de solera lo más que pueden tener es un pequeño bache y punto. En la Guerra, señalemos que destacaron también los Hermanos Elvira, quienes así se anotan otra gran temporada.
Por lo que respecta a los casteadores de Toño, debe subrayarse el éxito de los gallos casteados por su hijo Jónathan, que ya apuntaban en la temporada pasada. Jaime Almenara y Peña Simón Ponce también tuvieron gallos muy finos.
Fue una tristeza no contar en esta temporada con la información puntual y apasionada de nuestro inolvidable e insustituible amigo José Luis Melquiades, ya que mucho nos hubiera gustado seguir con la información de La Lucha y El Paso y de la Guerra y la Nueva, que él nos hacía llegar desde su teléfono de Los Llanos, siempre con las mismas entusiastas palabras de apertura: "¡Buenas, caballero!". Solo gracias a un par de aficionados muy generosos, hemos podido dar cuenta de las peleas de Tazacorte y Los Llanos, así como de algunas jornadas de otras contratas de la Banda.
El próximo miércoles, como siempre, publicaremos la crónica de esa última jornada, electrizante, de la que todos estábamos pendientes, entre Los Llanos y Tazacorte.
