Tras la carta dirigida por el Marqués del Sauzal al “Músico”, hoy estamos en La Palma, donde don Saturnino Pérez, el más grande casteador y aficionado que ha tenido aquella isla (si no Canarias en toda su historia), le escribe al cuidador orotavense hablándole, por supuesto, de gallos. Es una pena que falte la primera hoja de su carta, pero como documento vale la pena sin duda conocer lo que ha llegado a nuestras manos. Puede datarse en el inicio de los años 20. Vicente Pérez, más conocido por Vicente “Parranda”, es recordado por Pancho en su lista de casteadores y en sus Memorias, donde recuerda la riña entre su “gran pinto” y “el Despolado”: “una pelea que puso al público en pie y que ganó el pinto pese a que tenía una herida de aire enorme”. Don Ángel debe ser don Ángel Capote, el célebre cirujano palmero, propietario del fabuloso “Capote” (que era un gallo regalado por don Saturnino, descendiente del “Romanones”). He aquí la transcripción de esta segunda página:
“Don Pancho, pues le diré que en el primer vapor que vaya directo a Tenerife le remito el gallo. Yo no lo mando en vapor que vaya directo al Puerto, yo le pongo a usted un telegrama un día antes [diciéndole] en el vapor que es. No lo mando en el Comercial porque va directo a Garachico.
Tampoco me dice en su carta si recibió la pollita que le mandé, la melada, junto con la que le mandé a don Vicente Pérez, que la de él era gira. También le diré que de los nueve pollos que tengo, si no se me desgracian y me salen machos, le mando el casar para usted y otro para don Ángel.
También usted me dice que me agradecía que le contestara, pues más pronto no podía haber sido, que hoy la recibí y hoy mismo le contesto.
Sin más que decirle quedo a sus órdenes su aftº s.s. Saturnino Pérez.
Posdata. Amigo Don Pancho, cuando reciba el gallo recibirá también una carta. Vale.”
“Don Pancho, pues le diré que en el primer vapor que vaya directo a Tenerife le remito el gallo. Yo no lo mando en vapor que vaya directo al Puerto, yo le pongo a usted un telegrama un día antes [diciéndole] en el vapor que es. No lo mando en el Comercial porque va directo a Garachico.
Tampoco me dice en su carta si recibió la pollita que le mandé, la melada, junto con la que le mandé a don Vicente Pérez, que la de él era gira. También le diré que de los nueve pollos que tengo, si no se me desgracian y me salen machos, le mando el casar para usted y otro para don Ángel.
También usted me dice que me agradecía que le contestara, pues más pronto no podía haber sido, que hoy la recibí y hoy mismo le contesto.
Sin más que decirle quedo a sus órdenes su aftº s.s. Saturnino Pérez.
Posdata. Amigo Don Pancho, cuando reciba el gallo recibirá también una carta. Vale.”