Marín Gómez, hombre clave desde hace un par de décadas en el partido de La Espuela, ha tomado las riendas del histórico partido. Le deseamos éxito en su difícil labor, ya que hoy no es nada fácil llevar una casa de gallos.
Marín Gómez es uno de los hijos –todos ellos aficionados a los gallos– del extraordinario casteador de Tazacorte Manolín Gómez. Al venirse a vivir a Tenerife, nada fue para él más natural que entrar en el partido de La Espuela, donde siempre ha habido una conexión con La Palma. No solo Marín ha sido un casteador con buenos gallos, sino que durante muchas temporadas ha sido el soltador de su partido, realizando siempre su labor con entrega y con honradez, sin los chanchullos en que incurren otros.
En esta foto lo vemos precisamente sobre la valla, en una de las clásicas confrontaciones con el Norte. A la izquierda, otro soltador bien conocido, Pedro el de las Tapias, y en el centro Antonio Galapún, soberbio aficionado también del Valle de Aridane y también instalado en la Isla Picuda.