lunes, 4 de enero de 2010

Entrevista a Quico Pérez, por Fernando Ojeda

Con un día bastante soleado en la ciudad de Arucas, decido entrevistar a uno de los mejores casteadores de este Archipiélago y principal puntal del partido de Arucas: Quico Pérez, que rodeado de unas instalaciones maravillosas, de unos amigos que siempre están dispuestos a echarle una mano y bajo las atentas miradas de sus bípedos con plumas arropados por sus cantos comenzamos con una entrevista que me dejó con muy buen sabor de boca debido al conocimiento de una persona dedicada toda su vida a los gallos.

¿Cuándo comenzaste en este sacrificado pero maravilloso mundo del deporte de los gallos?

Desde niño con mi abuelo Domingo Pérez, que era aficionado al partido de Arucas e íbamos a ver las peleas a la gallera del Cuyás.

¿Cuál fue tu primera liga?

Mi primer gallo fue un giro que me regaló Don José Cuyás, era un gallo de la famosa raza de los clavelitos que preparó Don Julián Castillo.

Fuiste ayudante de Domingo “El Boyero” en la gallera de Arucas y luego te enfrentaste a él en el año 1973 y 1974 por el partido de Las Palmas.

Empecé con Domingo en San José en el año 1961 y después por Arucas de ayudante con él para luego ser el gallero de Las Palmas (fue la unión de la gallera Triana con la de San José).

¿Cómo era “Domingo el Boyero”?

Solo tengo palabras elogiadoras para él, Domingo era entrañable, un ser increíble todos lo querían. Tengo grandes recuerdos de él, me enseñó a vivir el gallo, a amarlo y cuidarlo y sobre todo a respetar al contrario.

¿Cuando estuviste en la gallera de Las Palmas ¿con qué casteadores contabas?

Conté con los mejores de la época: Don Nicolás Díaz de Aguilar, Antonio Falcón, los Hermanos Falcón de Arucas y no me puedo de olvidar de Chanito Falcón y de unos pocos casteadores de San José. Fueron grandes domingos de peleas históricas, las peleas se celebraban en el local de Educación y Descanso.

¿Que razas tuviste el privilegio de cuidar?

Los “mayas blancas” de Nicolás Díaz Aguilar eran gallos espectaculares, y cuando cuidé en Arucas tuve los colorados de Don Ramón Rodríguez que venían del colorado cubano (remitimos a los lectores a la historia del gallo de Pinar del Río). Hay que decir que el primero que casteó con este gallo fue Don José Villegas, en Teror.

¿Por qué no seguiste de gallero?

(Sonríe) Yo empecé con Domingo “el Boyero”, que, a pesar de que era una persona sumamente inteligente y muy sabia, carecía de estudios. Y yo quería prosperar en mi vida, ser alguien, y comencé a estudiar, aunque sin dejar los gallos.

Y para ti ¿cual fue el mejor gallero?

Sin lugar a dudas Don Adolfo Santana, “El Pichón”.


¿Recuerdas algún gallo?

Si, el gallino pinto de Nicolás Díaz que peleó ocho veces en cinco domingos seguidos.

Ya en tu etapa de casteador ¿Cuál ha sido tu mejor gallo que hayas sacado?

El mejor gallo que he sacado fue el colorado de siete peleas y la pelea que más tardó duró tres minutos, no peleó más porque no quise. Era hijo directo del giro la Isleña y la morena cubana de Don Ramón Rodríguez.

Para castear ¿que consideras mejor el gallo o la gallina?

Evidentemente la gallina.

¿Por qué?

Pues porque la gallina la haces tú y vives su procedencia, considero fundamental para cualquier casteador la gallina porque al gallo lo ves tú y puede ser uno u otro.

Hay casteadores que utilizan incubadoras como método de crianza ¿qué prefieres la incubadora o el calor de la madre?

El calor de la madre, claro está.

¿Cuál sería una buena alimentación para los pollos recién nacidos?

Yo los alimento con maíz molido y fundamentalmente una alimentación rica en proteínas, cereales y minerales. Hago una pasta con semillas y verduras. Eso sí, todo con productos naturales.

¿Qué es mejor, criarlos en jaulones o sueltos?

Sueltos evidentemente, porque el gallo buscará lo que él necesite. Ahora, si los crías en jaulones tienes que darle al gallo todo lo que él no puede buscar para alimentarse. En eso es en lo que nos aventajan los palmeros respecto a los demás, en la cría.

¿Pruebas tus gallos a la hora de encerrarlos en las casas de gallos?

Antiguamente los gallos se llevaban a las casas inmaculadamente. Era el gallero el que los descrestaba y los atusaba. Si no era así, no te los recogía. En estos tiempos los prueba la gran mayoría.

¿Cuál es tu partido?


Siempre Arucas.

En la temporada 2008-2009 encerraste en Güímar ¿y esta temporada 2009-2010 donde encerrarás?

Aún no lo se.

¿Destacó algún gallo tuyo la temporada pasada?


Dicen que sí pero yo no los vi.


¿Con cuantos ejemplares cuentas?

Tengo sobre unos treinta gallos.

¿Qué opinas de que se estén reemplazando las espuelas naturales por las espuelas plásticas?

Estoy totalmente en contra, porque ahora se están peleando con espuelas plásticas, de carey o incluso con espinas de pescado y no se sabe muy bien. Si peleamos, todos debemos pelear en igualdad de condiciones. Yo estoy a favor de lo que se ha hecho siempre, y en Canarias se han utilizado las espuelas naturales.

¿Cuál es tu opinión sobre la forma en que ahora se compite en el Campeonato Regional?


No me gusta que se pelee por galleras sino por islas como llegó a hacerse, pero lamentablemente se ha perdido esto.

¿Que gallero o galleros destacarías en la actualidad?

A Samuel Mateo por amistad y porque se hizo en la gallera de Arucas. Es como un familiar y es nieto de Antonio “El Rubio”, que en paz descanse. Recuerdo que él por Telde y yo por Arucas se vieron grandes peleas con sus melados y mis colorados. (Entrevistador: de esto lo corroboro, más de una vez me tuve que levantar de la silla porque los nervios no me dejaban respirar).

¿Has participado en los Torneos?

Si, concretamente tres: uno en Gran Canaria y dos en La Palma. En Gran Canaria gané y en La Palma hicimos un gran papel a espuela corta contra los peninsulares.

¿Qué opinión tienes de la Federación ?

Todo lo que se haga por el bien de los gallos me parece genial. Lo que si es una pena es que no se siga peleando en la Gallera del López Socas. Esa gallera costó mucho tenerla en la ciudad de Las Palmas, muchos aficionados y casteadores lucharon por ella cuando el derribo del Cuyás. Recuerdo muy bien que tanto Don Pedro Cárdenes, Don José Araña, Don Fernando Ramírez, Don Antonio Ayala Ojeda, mí compadre Don Juan Rodríguez Drincourt y muchos aficionados más hicieron lo impensable por tenerla.

Un gallero: Samuel Mateo.
Un casteador: Peña La Lucha.
Un color (gallino, melado, giro, etc.): Colorado.
Un gallo: El “Quinientos”.
Un campeonato regional: El del año 2003 en La Palma, que ganó Gran Canaria en la final contra La Palma y encima con un gallino mío. Los palmeros se quedaron rascados (Sonríe) porque perdieron en casa, pero fue todo muy espectacular.
Un recuerdo: Las horas que pasé con Adolfo Santana “El Pichón”.
Una anécdota: Un melado tanque “El chiquitito de Varea” de tres libras y medio. Era un gallo extraordinario, parecía un kíkere, lo vi pelear en San Lúcar de Barrameda y nunca pensé que ese gallo me daría hijos, nietos y bisnietos para subir a la valla.

Quico Pérez ha sido una persona sumamente generosa con los demás, y gracias a él muchos casteadores le deben grandes castas, porque nunca se ha negado a ayudar a los demás, ha repartido gallinas de sus ligas y siempre dispuesto a echar una mano.
Quico es un gran gallero, gran casteador, pero sobre todo una excelentísima persona, y quien me ha enseñado más de este mundo de los gallos. A él va dedicada esta pequeña entrevista.