Este gallo que encabeza
nuestro artículo de hoy es el famoso “Despicado” de Sabino León, un giro melado
cuya característica era el juego, girando tanto para la derecha como para la
izquierda, según lo describe una ficha hecha en la época y que reprodujimos
aquí no hace mucho. Ganó tres riñas en 1951 y una, extraordinaria, en 1953.
A la misma serie
fotográfica pertenecen estas otras tres imágenes de gallitos de Tazacorte. En
la primera vemos al “gallo de Saturno”:
Por fin tenemos “el
Artillero de Lope”. Me crea cierta confusión que sea el mismo “Artillero” de Neno
Pereira, ya que es extraño tratándose de figuras de partidos rivales. Ese gallo
fue el mejor de su tiempo, peleando entre el 46 y el 49 (la foto es de 1947).
Venía de los “escopetas”, que a juicio de Orlando Dorta eran gallos orientales,
como los jabados o los patas verdes. Opinaba el hijo del “Músico” que en La
Palma predominaban los gallos orientales, gallos feos y bruscos, y que los
gallos verdaderamente finos, preciosos, eran los que tenía el partido de San
José, en Las Palmas (siempre se pensará, durante las primeras décadas del siglo XX,
en los gallos de don Francisco Aguilar).
Son fotos hechas con gran
cuidado por un buen profesional, lo que revela una vez más el amor a los
gallos.
En las siguientes fotos, muy pintorescas, vemos a uno de los aficionados más sabios de las islas, verdadera institución
del mundo gallístico canario, el gran Totoño, muy joven, precisamente con un
hijo del “Artillero”: